Avance científico en la prevención de enfermedades neurodegenerativas

Vacuna contra el herpes zóster podría reducir un 20% el riesgo de demencia, según estudio en Gales

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Un estudio pionero realizado en Gales indica que la vacuna contra el herpes zóster podría reducir en un 20% el riesgo de desarrollar demencia, superando la eficacia de intervenciones conocidas hasta ahora contra esta enfermedad neurodegenerativa.

El 2 de abril de 2025, ScienceDaily publicó un estudio revolucionario llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Cardiff que sugiere que la vacuna contra el herpes zóster, también conocida como shingles, podría reducir significativamente los nuevos diagnósticos de demencia. Los resultados, publicados en una prestigiosa revista médica y presentados públicamente días antes del 7 de abril, abren nuevas perspectivas sobre la prevención de esta enfermedad, con implicaciones globales.

El estudio examinó datos médicos de más de 296.000 adultos mayores de 65 años en Gales, comparando a aquellos que recibieron la vacuna Zostavax entre 2013 y 2020 con personas no vacunadas. Los resultados revelaron que los vacunados tenían un 19,9% menos de probabilidades de desarrollar demencia en los siete años posteriores a la vacunación, lo que equivale a evitar aproximadamente cinco casos por cada 1.000 personas inmunizadas.

Este efecto supera el de tratamientos actuales como los inhibidores de la colinesterasa o el ejercicio regular, que reducen el riesgo entre un 10% y un 15%, según datos de la Alzheimer’s Society. La Dra. Rhiannon Owen, epidemióloga principal del estudio, calificó el hallazgo como “inesperado y emocionante” durante una rueda de prensa en Cardiff el 3 de abril.

El herpes zóster, causado por el virus varicela-zóster, afecta principalmente a personas mayores y puede provocar complicaciones dolorosas como la neuralgia postherpética. Aunque la vacuna fue desarrollada para prevenir estas manifestaciones, los investigadores teorizan que también podría prevenir la inflamación cerebral o la reactivación del virus en el sistema nervioso, factores potencialmente vinculados al desarrollo de placas amiloides relacionadas con el Alzheimer.

La Dra. Owen y su equipo no afirman que el virus cause directamente la demencia, pero señalan que podría actuar como desencadenante en personas con predisposición. El Dr. Pascal Geldsetzer, coautor del estudio, explicó a The Guardian que este hallazgo justifica futuras investigaciones clínicas con vacunas más modernas como Shingrix, la cual reemplazó a Zostavax en Reino Unido desde 2023.

A pesar del entusiasmo, los científicos insisten en que se requieren estudios adicionales para confirmar estos resultados. Algunos expertos, como el Dr. David Curtis del University College London, advirtieron que la correlación observada podría deberse a variables no controladas, como diferencias en el acceso a servicios médicos.

El hallazgo ha generado interés internacional. En el Reino Unido, el NHS calificó los resultados como “potencialmente transformadores” en un comunicado emitido el 5 de abril, y se reportó un incremento del 15% en las consultas para vacunación contra el zóster en Gales entre el 3 y el 6 de abril. En Estados Unidos, organizaciones como AARP solicitaron al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) una reconsideración del acceso a Shingrix, cuyo precio y cobertura sigue siendo una barrera para muchos adultos mayores.

A nivel global, el impacto podría ser aún más significativo en países de bajos ingresos, donde el herpes zóster es común pero la vacunación escasa. La OMS estaría considerando incluir esta evidencia en su agenda de investigación de 2025. En redes sociales, el estudio ha generado comentarios positivos por parte del público, que celebró la posibilidad de una vacuna que proteja tanto la piel como el cerebro.

Con más de 55 millones de personas afectadas por la demencia en todo el mundo y un costo económico que supera los 1,3 billones de dólares anuales, este estudio galés podría marcar un punto de inflexión en la prevención de una de las enfermedades más devastadoras del siglo XXI.

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