Este viernes, una tragedia aérea sacudió la región de Aysén, cuando una avioneta Piper Navajo, matrícula CC-RN, se precipitó a tierra en las cercanías de Cerro Castillo.
La aeronave, operada por Transportes Aéreos San Rafael, había despegado desde Coyhaique con destino a Chile Chico, pero perdió contacto con los radares a las 10:20 a.m., según confirmó la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) de Chile.
El accidente dejó un saldo de siete fallecidos, y según informes del delegado presidencial, Araya, las familias de las víctimas ya fueron notificadas del trágico suceso. “El accidente fue de tal magnitud que no hubo posibilidad de sobrevivientes”, lamentó Araya, quien también subrayó la violenta naturaleza del impacto, explica T13.
En cuanto a las operaciones de rescate, el delegado destacó la rápida y coordinada respuesta de diversas instituciones. El Ejército, Carabineros, y actores del sector privado unieron esfuerzos para localizar el lugar del siniestro, en el sector de Las Horquetas. En apoyo a estas labores, un helicóptero de la Fuerza Aérea de Chile (FACH) se encuentra trabajando en la recuperación de los cuerpos de las víctimas.
Las autoridades han asegurado que los servicios públicos continuarán operativos durante el fin de semana para facilitar todos los procedimientos necesarios tras esta lamentable tragedia.