El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha instruido a su equipo diplomático para que rechace la posible inclusión de Venezuela en los BRICS, la alianza económica formada por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
Aunque Lula no podrá participar personalmente en las próximas discusiones del grupo, debido a una caída sufrida en la residencia presidencial en Brasilia, ha dejado claras sus directrices al equipo encabezado por el canciller Mauro Vieira.
El mandatario brasileño ha subrayado que Brasil debe adoptar una postura firme frente a la solicitud de Venezuela para unirse al bloque. Esta decisión se enmarca en la falta de reconocimiento por parte de Lula a los resultados electorales de Nicolás Maduro, cuyo gobierno ha sido objeto de críticas internacionales por la falta de transparencia en los procesos electorales. El Tribunal Supremo de Venezuela, mantuvo en secreto las actas de las últimas elecciones, una práctica recurrente durante el chavismo que ha generado desconfianza en los resultados oficiales.
A pesar de la ausencia de Lula en las reuniones presenciales, el presidente participará de forma remota en las conversaciones. La postura de Brasil frente a Venezuela ha sido respaldada por su equipo diplomático, que considera que la situación política venezolana no es compatible con los principios del grupo BRICS, que busca promover el desarrollo económico y la cooperación internacional.
Hasta el momento, más de 30 países han mostrado interés en unirse a la alianza, lo que podría ampliar considerablemente su alcance global. Sin embargo, la inclusión de nuevos miembros, como Venezuela, sigue siendo un tema de debate entre las naciones fundadoras del grupo.
