El Gobierno argentino está dando pasos audaces hacia una nueva era de relaciones internacionales, como lo evidenció el sorpresivo encuentro entre el presidente Javier Milei y la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, en Ushuaia.
Este movimiento marca el inicio de lo que el Presidente ha llamado una “nueva doctrina de política exterior”, con el objetivo de fortalecer los lazos con Estados Unidos y otras potencias occidentales.
Uno de los principales cambios es la propuesta de convertir a Argentina en un “socio global” de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Esta iniciativa será presentada durante el próximo viaje del ministro de Defensa, Luis Petri, a Dinamarca, donde firmará un contrato para la compra de 24 aviones caza F/16 Falcon Fighting, fabricados por Estados Unidos y actualmente en posesión de Dinamarca, reseñan medios internacionales.
El financiamiento para esta compra, que asciende a 700 millones de dólares, será proporcionado en parte por Estados Unidos. Además, Petri y su equipo también viajarán a Noruega y Bélgica para negociar diversos acuerdos relacionados con la defensa nacional.
Relación más estrecha con Estados Unidos
La nueva relación más estrecha con Estados Unidos también es fundamental en estos planes, ya que Argentina busca no solo fortalecer su posición en la región, sino también obtener apoyo financiero y tecnológico para sus fuerzas armadas.