Este fin de semana, un ataque incendiario en el sur de Chile destruyó por completo 13 camiones en el Parque Eólico Caman, localizado en la región de Los Ríos, a más de 740 kilómetros de la capital de país.
De acuerdo con información del Ministerio Público, se “investiga un incendio intencional de camiones en el sector Caman de la comuna de Paillaco, donde se realizan obras para la construcción de un parque eólico”, siniestro que “fue provocado por un grupo de sujetos que llegaron hasta el lugar armados y con los rostros cubiertos”.
Por lo tanto, la magnitud del ataque llevó a parlamentarios de oposición a presionar al Gobierno para extender el estado de excepción constitucional a Los Ríos, instrumento que es aplicado en toda la región de La Araucanía y en algunas provincias de la región del Biobío.
Efectivamente, desde el mes de mayo del año 2022, en mencionada zona rige un estado de excepción constitucional ratificado por el Congreso en 23 oportunidades, medida que posibilita el despliegue militar en la zona para que apoyen a Carabineros (Policía militarizada) en el control del orden público, incluyendo vigilancia en las principales carreteras y caminos aledaños.
Ciertamente, en La Araucanía y otras zonas del sur de Chile existe desde hace décadas una disputa territorial entre el Estado, algunas comunidades mapuches y empresas forestales que explotan tierras consideradas ancestrales por los indígenas.