Este domingo en una jornada electoral marcada por giros inesperados, Luisa González del partido Revolución Ciudadana y el empresario Daniel Noboa avanzan a la segunda vuelta presidencial en Ecuador. Con el 90% de los votos escrutados, ambos candidatos han logrado asegurar su lugar en la contienda, desafiando las expectativas que se habían creado en torno a otros contendientes.
González, respaldada por el partido del expresidente Rafael Correa, ha obtenido el 33.26% de los votos, mientras que Noboa, un candidato de tan solo 35 años cuya incursión en la política comenzó en 2021, sorprendió a muchos al lograr el 23.73% de los votos. El resultado ha sido particularmente llamativo debido a la alta participación ciudadana, a pesar de la grave crisis de violencia que actualmente enfrenta el país.
La elección ha sido una verdadera montaña rusa, ya que otros candidatos que las encuestas posicionaban en lugares prominentes han quedado rezagados. Expertos en seguridad, como Jan Topic, y figuras conocidas como el exvicepresidente Otto Sonnenholzner, así como el líder indígena Yaku Pérez, quienes mantuvieron una disputa constante por el segundo puesto a lo largo de la campaña, se han quedado en posiciones más bajas.
Asimismo se manifestó en la figura de Daniel Noboa. A pesar de su relativa juventud y su entrada tardía en la política, su desempeño en las urnas lo ha catapultado a la segunda vuelta. Criado en un entorno electoral y con un linaje familiar profundamente arraigado en la política y los negocios, el hijo del empresario Álvaro Noboa y la excandidata a la Vicepresidencia Anabella Azín, ha logrado captar la atención y el respaldo de una porción significativa de la población, así lo informaron medios internacionales.
La noche electoral se vio marcada por el hecho de que Noboa, visiblemente sorprendido por su propio éxito, no había planeado ningún evento oficial y tuvo que recibir a los medios en su hogar. A pesar de ello, el candidato ha demostrado tener la política en la sangre y ha sabido aprovechar sus conexiones familiares y su experiencia como asambleísta para lograr un resultado que pocos anticiparon.
Con la segunda vuelta en el horizonte, la elección presidencial de Ecuador sigue siendo un escenario dinámico y lleno de incertidumbre. Los resultados inesperados y los cambios en las posiciones de los candidatos reflejan la complejidad del panorama político actual y la voluntad del electorado de sorprender incluso a los analistas más experimentados.
