Este miércoles el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reflexionó que no habrá inestabilidad política o violencia en Ecuador después de que el mandatario de aquel país, Guillermo Lasso, disolviera la Asamblea Nacional argumentando que hay una “grave crisis política” derivada del juicio político contra él.
“No creo yo que haya inestabilidad y, además, no lo deseo. Ojalá y los hermanos ecuatorianos puedan resolver esto, así con este procedimiento, si se va a convocar a nuevas elecciones que participen todas las fuerzas políticas y no creo que haya violencia política”, valoró durante su rueda de prensa matutina.
Sin embargo, López Obrador aseguró que su Gobierno estará alerta ante posibles “enfrentamientos” y aseveró que la embajadora mexicana en Ecuador “seguramente está atendiendo” a los mexicanos en dicho país.
De hecho, en un mensaje a la nación, Lasso comunicó la muerte cruzada, contemplada en la Constitución ecuatoriana del año 2008 por “grave conmoción interna y política”, luego de haber hecho acto de presencia ante la Asamblea para realizar su razonamiento ante la incriminación formulada por la oposición por un supuesto delito de malversación.
Se ha conocido que el presidente apeló a esta figura contemplada en la Constitución del año 2008, ante la duda de tener los votos suficientes para salvar la moción de reprobación en el Parlamento que promovieron el correísmo y el conservador Partido Social Cristiano, junto a legisladores del movimiento indígena Pachakutik y de Izquierda Democrática (ID), encima de otros independientes. Con información de Primicias24.