La NASA ha informado de una poderosa erupción solar de clase X7.1, una de las más intensas en la escala de clasificación de estas explosiones cósmicas.
Este tipo de erupciones solares pueden tener consecuencias significativas para las comunicaciones por satélite, las redes eléctricas y los sistemas GPS en diversas partes del mundo, especialmente si la actividad continúa en los próximos días, reseñó UHNplus.
Los expertos advierten que eventos de esta magnitud, que liberan enormes cantidades de radiación y partículas energéticas hacia el espacio, pueden también desencadenar auroras boreales visibles en zonas más alejadas de los polos de lo habitual. Esto significa que personas en latitudes medias podrían tener la oportunidad de presenciar este fenómeno natural, generalmente exclusivo de regiones cercanas al Ártico y la Antártida.
Las autoridades de la NASA, así como agencias meteorológicas, están monitoreando de cerca los efectos de esta erupción en la Tierra. Si bien se trata de un fenómeno común en los ciclos solares, su intensidad en esta ocasión podría generar alteraciones temporales en las infraestructuras tecnológicas globales.
Este evento solar destaca la importancia de continuar vigilando la actividad del Sol, cuyo comportamiento influye de manera directa en diversos sistemas críticos para la vida moderna, desde las comunicaciones hasta la navegación global.
