Este martes, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), alertó sobre la necesidad de aminorar la contaminación proveniente de los sectores farmacéutico, agrícola y de salud, para así poder reducir la propagación de superbacterias resistentes a los antibióticos
"Reducir la contaminación proveniente de los sectores farmacéutico, agrícola y de salud es esencial para reducir la aparición, transmisión y propagación de super bacterias, unas cepas de bacterias que se han vuelto resistentes a todos los antibióticos conocidos, y demás casos de patógenos con resistencia a los antimicrobianos (conocida como RAM)”, aclaró el organismo en un informe.
Asimismo, advirtió la existencia de peligro para el año 2050, de que podrían originarse hasta 10 millones de muertes por año debido a este fenómeno, una cifra comparable a la tasa mundial de fallecimientos por cáncer en año 2020.
Hasta diez millones de personas podrían morir anualmente de aquí a 2050 debido a la resistencia a los medicamentos que han desarrollado algunas bacterias y otros microbios, según afirma el @UNEP https://t.co/OtonKiGPcA
— Noticias ONU (@NoticiasONU) February 7, 2023
De acuerdo con lo que ha señalado la entidad, esta situación está perjudicando gravemente tanto el bienestar de los seres humanos, los animales, las plantas, así como también a la economía y a la seguridad alimentaria.
"El creciente uso y abuso de antimicrobianos y otros factores de estrés microbiano (por ejemplo, la presencia de metales pesados y otros contaminantes) crean condiciones favorables para que los microorganismos desarrollen resistencia", señaló la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
“Tres sectores económicos y sus cadenas de valor son los principales causantes de la aparición y propagación de la RAM en el medio ambiente, por tanto, este informe presenta un análisis de: productos farmacéuticos y demás productos químicos, agricultura y alimentación, y los sistemas de atención en salud, junto con los contaminantes del saneamiento deficiente, las aguas residuales y los efluentes de desechos en los sistemas municipales”, estableció el PNUMA.