BBVA, Santander y CaixaBank lideran la incorporación de servicios basados en Bitcoin y activos digitales en España, preparando el terreno para una transformación financiera regulada por el nuevo marco europeo MiCA
En un giro que transforma el panorama financiero español, los principales bancos del país, incluidos BBVA, Santander y CaixaBank, han comenzado a ofrecer servicios relacionados con criptomonedas. Este avance se enmarca en la entrada en vigor del reglamento europeo MiCA (Markets in Crypto-Assets Regulation), que proporcionará un marco normativo claro para los criptoactivos a partir de enero de 2025.
BBVA ya es pionero en este ámbito, con servicios de custodia y compraventa de Bitcoin que opera en Suiza desde hace más de un año, estrategia que ahora busca replicar en España. Santander, a través de su filial Openbank, también avanza en la integración de activos digitales, enfocándose en soluciones para pagos internacionales y remesas. Por su parte, CaixaBank ha lanzado un proyecto piloto que incluye la educación financiera para preparar a los usuarios en el uso seguro de criptomonedas.
La regulación MiCA, según expertos, será clave para fomentar la confianza en los criptoactivos al garantizar mayor seguridad jurídica y un entorno competitivo en toda la Unión Europea. Este marco exigirá a las empresas publicar información clara sobre riesgos e implicará una supervisión centralizada para proteger a los consumidores.
Aunque los bancos españoles avanzan con cautela, introduciendo servicios de manera gradual, esta integración marca un cambio paradigmático en la percepción de las criptomonedas, que ahora se posicionan como una parte integral del sistema financiero tradicional. Sin embargo, se espera que la regulación evolucione rápidamente para adaptarse a nuevos desarrollos, como las finanzas descentralizadas (DeFi) y los tokens no fungibles (NFTs), que actualmente están fuera del alcance de MiCA.
Con este movimiento, España se posiciona a la vanguardia de la innovación financiera, anticipando una creciente adopción de criptomonedas por parte de usuarios minoristas e institucionales.
