El suicidio es el hecho por el cual una persona decide darle fin a su vida de manera intencionada. Miles de personas se suicidan a diario en el mundo entero, entre estos se encuentran incluidos jóvenes y adolescentes que por alguna razón atentan contra su vida. De hecho, según los expertos en el tema, esta es la tercera causa de fallecimiento más frecuente en jóvenes que están en edades comprendidas entre 15 y 24 años.
Se ha sabido, que la tasa de suicidios y de intentos de aniquilamiento propio crece enormemente durante la adolescencia, ya que es en esta etapa cuando el joven se encuentra más vulnerable a los factores emocionales inmersos en la sociedad. Dado que es el tramo de la vida cuando se sienten desorientados, carentes de comprensión y de afecto.
En este contexto, los motivos que conllevan a los jóvenes al suicidio son muy complejos, además de innumerables, muchas veces estos suelen ser producto de estados depresivos provenientes de la presión de querer encajar en la sociedad y ser aceptados, sobre todo formar parte de grupos que lideran en las comunidades e instituciones educativas.
Aunado a esto, las personas jóvenes con trastornos de salud mental, como la ansiedad, depresión, desorden de bipolaridad u otros, tienden a tener más probabilidades de autodestrucción. Como también, aquellos adolescentes que reciben humillaciones y son frecuentemente acosados por sus compañeros de clase.
Por otra parte, es apropiado que, aunque estos actos de suicidio no siempre se pueden prevenir, debe estar alerta ante cualquier señal y tomar medidas adecuadas para ayudar a un adolescente que se encuentre en estado de aflicción. Por lo que se les recomienda a los padres y familiares mantener la comunicación con sus hijos, mostrarles su preocupación y manifestarles su inmenso amor.