Tres misioneros estadounidenses fueron asesinados este jueves por una banda armada que atacó un orfanato en Lison 49, en Plaine, al norte de Puerto Príncipe.
La organización Misiones en Haití confirmó la tragedia, que ocurrió en una zona controlada por grupos criminales desde hace varios meses. Entre las víctimas se encuentran Natalie Baker y su esposo Davy Lloyd, hija y yerno del legislador del estado de Misuri, Ben Baker.
El propio Ben Baker compartió la devastadora noticia a través de redes sociales. “Mi corazón está partido en mil pedazos. Nunca había sentido este tipo de dolor”, escribió en Facebook el representante republicano. Natalie y Davy habían viajado a Haití para trabajar como misioneros, dedicándose principalmente al cuidado de niños haitianos en el orfanato administrado por la ONG Missions in Haiti Inc., fundada por los padres de Davy en el año 2000, reseñan medios internacionales.
Haití se encuentra sumido en una espiral de violencia exacerbada desde finales de febrero, con bandas armadas perpetrando asesinatos, ataques, violaciones y secuestros. La comunidad internacional, incluidos líderes políticos como el expresidente Donald Trump, han condenado la violencia. “Dios bendiga a Davy y Natalie. Qué tragedia. Haití está totalmente fuera de control. ¡Encuentra a los asesinos AHORA!”, expresó Trump en Truth Social.
En respuesta a la creciente violencia, el Gobierno interino de Haití ha prorrogado el toque de queda en el departamento del Oeste, donde se encuentra la capital, e implementado el estado de emergencia para intentar frenar la criminalidad. A pesar de las advertencias del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre las condiciones de seguridad en Haití, Natalie y Davy continuaron su labor humanitaria, uniendo sus destinos a la misión de traer esperanza a los más vulnerables.
