Las aguas desatadas por el desbordamiento de un lago glaciar causaron estragos en la capital de Alaska, dejando a su paso edificios destruidos y estructuras dañadas.
De este modo, en un devastador incidente que tuvo lugar durante el fin de semana, las aguas embravecidas provenientes del desbordamiento de un lago glaciar arrasaron las riberas de los ríos en la capital de Alaska, dejando a su paso al menos dos edificios destruidos y numerosas estructuras dañadas. Las autoridades informaron que, si bien los niveles de agua en el río Mendenhall han comenzado a disminuir desde el domingo, las riberas de los ríos aún se mantienen inestables.
Por otro lado, en la ciudad de Juneau, espectadores se congregaron en un puente sobre el río y a lo largo de las orillas del lago Mendenhall, capturando imágenes y videos de la devastación. Aunque la afluencia de personas fue menor esta semana, una imagen impactante mostraba una casa precariamente sostenida en la erosionada ribera del río, mientras el agua de color lechoso fluía con fuerza.
Por su parte, el subadministrador de Juneau, Robert Barr, confirmó que dos casas quedaron completamente destruidas y una tercera resultó parcialmente dañada debido a la inundación. Afortunadamente, no se han reportado heridos ni fallecidos como resultado de este desastre natural.
Se ha conocido que entre las ocho estructuras dañadas que han sido declaradas en ruinas, se incluyen dos edificios de apartamentos, cada uno con seis unidades. Aunque la magnitud total de los daños aún no ha sido evaluada monetariamente, Barr expresó optimismo en relación con la posibilidad de llevar a cabo reparaciones sustanciales en algunas de las estructuras afectadas, incluida la estabilización de las orillas. Con información de El Nacional de Venezuela.
