La tranquila rutina del Zoológico de Magdeburgo, en Alemania, se ve sacudida por un enigma inesperado: un grupo de chimpancés ha perdido repentinamente gran parte de su pelaje, desatando especulaciones y preocupaciones entre cuidadores y visitantes por igual.
Asimismo atribuyeron un “acicalamiento excesivo” que ahora suscita temores sobre posibles comportamientos de autolesión entre los primates. Las calvas notorias en sus cuerpos, incluyendo cabeza, pecho y espalda, han desconcertado a los expertos en vida silvestre y generado una controversia que no cesa.
Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA) ha emitido un comunicado alertando sobre la situación, resaltando la importancia de investigar a fondo las causas detrás de esta inusual pérdida de pelaje. Mientras se barajan hipótesis sobre estrés o condiciones ambientales, la posibilidad de comportamientos de autolesión agrega una nueva capa de intriga a este misterio en evolución.
La atención se centra ahora en el bienestar de los chimpancés y en la necesidad apremiante de garantizar condiciones óptimas para su salud física y emocional. Se espera que el zoológico tome medidas concretas para abordar este enigma y asegurar el bienestar de todos los animales bajo su cuidado, mientras la comunidad científica busca respuestas a este inquietante fenómeno.
