En un duro golpe contra la migración ilegal, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos ha deportado a más de 380,000 inmigrantes que intentaron ingresar ilegalmente al país desde mayo de este año, según han informado las autoridades fronterizas.
Este récord de expulsiones, realizadas bajo el Título 8, incluye a más de 60,000 miembros de unidades familiares, marcando una escalada en la respuesta a la crisis en la frontera. Así lo informaron a través de las redes sociales.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), en colaboración con el DHS y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, ha implementado decenas más de vuelos de expulsión a destinos globales, con más de 5000 personas de México siendo devueltas a su país de origen. Estas medidas tienen repercusiones significativas, ya que los deportados enfrentan una prohibición de solicitar admisión a Estados Unidos durante al menos cinco años y podrían enfrentar procesos penales si intentan reingresar sin autorización.
Estas acciones forman parte de la estrategia de la administración Biden para manejar la crisis en la frontera, que ha experimentado más de 3.2 millones de detenciones de migrantes que intentaron ingresar ilegalmente en el año fiscal 2023. Corey Price, Director Ejecutivo Asociado de Operaciones de Deportación y Control del ICE, afirmó: “Continuaremos repatriando a su país de origen a los no ciudadanos sin base legal para permanecer en los Estados Unidos”.
A pesar de estos esfuerzos, el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes ha calificado las cifras como “alarmantes”, atribuyendo la situación a las denominadas “políticas de fronteras abiertas”. Kristie Canegallo, subsecretaria interina de Seguridad Nacional, destaca la expansión de vías legales liderada por la administración Biden, incluyendo programas como el parole humanitario y el Estatus de Protección Temporal (TPS) para varios países.
Sin embargo, la eliminación del Título 42, una política de la era Trump, ha generado críticas. La reciente liberación de más de 7000 Extranjeros con Intereses Especiales (SIA) que ingresaron a través de la plataforma CBP One ha suscitado preocupaciones sobre posibles infiltraciones terroristas. A medida que la presión sobre el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, aumenta, varios congresistas han solicitado su destitución debido a la crítica situación en la frontera.