Este domingo, el expresidente peruano Alejandro Toledo, arribó a Lima deportado por Estados Unidos, para ser imputado por corrupción y lavado de dinero en el marco del megaescándalo de sobornos pagados por la constructora brasileña Odebrecht.
De esta manera, Toledo, de 77 años de edad, llegó a la capital peruana en un vuelo desde Los Ángeles y bajo vigilancia de agentes de la Interpol. En el aeropuerto internacional Jorge Chávez, fue recibido por agentes de seguridad, según imágenes publicadas por las televisoras.
Se ha sabido, que es inculpado de haber aceptado millones de dólares de Odebrecht a cambio de licitaciones para obras públicas. Los fiscales exigen 20 años y seis meses de prisión.
Por otro lado, a petición de un juez, Toledo, que gobernó desde el año 2001 al año 2006, se entregó el fin de semana en un tribunal federal en San José, California, para la fase final del proceso de extradición.
Con información de El Nacional de Venezuela.