En una conmovedora entrevista llevada a cabo este lunes, tuvimos el agrado de conversar con Sarai Morales, Directora de la Academia Ángel Rose, una organización comprometida en brindar apoyo y alegría a los niños y adolescentes que luchan contra el cáncer en el Hospital Oncológico Luis Razetti de Caracas, Venezuela.
Morales compartió su motivación personal para llevar a cabo estas visitas: “Fui paciente oncológico a los 17 años y viví en experiencia propia las subidas y bajadas de estar en un hospital… Esa es nuestra principal razón”. Para ella y su equipo, esta labor va más allá de una simple actividad caritativa; es una misión de compasión y solidaridad hacia aquellos que enfrentan una batalla tan difícil.
Sarai contó que las actividades organizadas por la Academia Ángel Rose, como clases de modelaje y pasarela, así como de repostería, ofrecen una oportunidad para que los pacientes encuentren alegría y distracción en medio de su tratamiento.
Reacciones emocionales
La reacción emocional de los pacientes es evidente: felicidad, esperanza y una sonrisa se reflejan en sus rostros, incluso en los momentos más difíciles.
La labor humanitaria de la Academia, abarca a pacientes de todas las edades, desde los más pequeños hasta los jóvenes que han superado la enfermedad. Morales destacó la importancia de invitar a ex pacientes para inspirar esperanza y mostrar que la curación es posible, incluso en los momentos más oscuros.
Sembrando sonrisas y esperanza en medio de la adversidad
Estas visitas tienen un impacto significativo en el estado emocional y mental de los pacientes y sus familias.
Morales enfatizó que brindan apoyo, cuentan historias positivas y ayudan a fortalecer la determinación de aquellos que están en medio de su tratamiento y recuperación.
Como mensaje final, Morales instó a otras organizaciones a unirse a esta noble causa: “Estaremos construyendo un mejor mundo”. Su llamado a la acción es claro: cualquier gesto de bondad, por pequeño que sea, puede marcar una diferencia significativa en la vida de quienes están sufriendo.
