Desde la reforma del sistema de pensiones en 2013, la edad legal de jubilación en España ha estado aumentando gradualmente, en un proceso que culminará en 2027.
Este cambio, que se implementa mediante un periodo transitorio, pretende adaptar el sistema a las nuevas realidades demográficas y económicas del país, según la web medios locales.
La reforma establece un aumento escalonado de la edad mínima para acceder a la jubilación, que comenzó con un mes adicional por cada año entre 2013 y 2018, y dos meses por cada año a partir de 2018. Este proceso continuará hasta alcanzar los 67 años en 2027, siempre que el trabajador haya cotizado menos de 38 años y 6 meses. En cambio, aquellos que hayan acumulado 38 años y 6 meses o más de cotización podrán jubilarse a los 65 años.
El objetivo de esta reforma es asegurar que los trabajadores permanezcan en el mercado laboral durante más tiempo, aumentando así el número de años cotizados como requisito para acceder a la pensión completa. Este año, la edad legal de jubilación se sitúa en 66 años y seis meses, y seguirá incrementándose hasta alcanzar los 67 años en 2027.
A partir del 1 de enero de 2025, los cambios continuarán. Para acceder a la jubilación ordinaria, será necesario haber cumplido 65 años y tener al menos 38 años y 3 meses cotizados. Si no se cumple con este requisito, la edad de jubilación se elevará a 66 años y 8 meses. Esto implica un aumento de tres meses en el tiempo de cotización necesario para jubilarse a los 65 años, o esperar dos meses adicionales si no se alcanzan los 38 años de cotización.
Además, la jubilación anticipada también se verá afectada. La edad para la jubilación anticipada voluntaria se retrasará hasta los 66 años y 8 meses, y se introducirán nuevos coeficientes reductores en las pensiones que superen la prestación máxima permitida. La edad mínima para la jubilación anticipada voluntaria será de 63 años, siempre que se haya cotizado al menos 38 años y 3 meses.
En cuanto a la jubilación anticipada involuntaria o forzosa, que permite jubilarse hasta cuatro años antes de la edad legal ordinaria, se mantendrá el requisito de tener al menos 15 años cotizados para acceder al 50% de la base reguladora de la Seguridad Social. Durante el periodo 2023-2026, se mantendrán los coeficientes acumulativos, que permiten un incremento del 0,21% por mes cotizado en los primeros 49 meses adicionales, y del 0,19% por mes en los siguientes 209 meses.
Estos cambios reflejan el compromiso del sistema de pensiones español de asegurar su sostenibilidad a largo plazo, adaptándose a las necesidades de una población que vive cada vez más tiempo. Las modificaciones en la edad de jubilación y los requisitos de cotización pretenden garantizar que el sistema siga siendo viable, proporcionando pensiones adecuadas a quienes han contribuido a lo largo de su vida laboral.
