El joven francés Côme Girardot, de tan solo 22 años, ha establecido un nuevo récord mundial de “death diving” tras lanzarse desde una vertiginosa altura de 44.3 metros (145.34 pies) en la cascada La Cimbarrilla, en España.
Superando el récord anterior de 41.7 metros, Girardot ha llevado esta disciplina extrema a un nuevo nivel.
El “death diving” o “døds” es una práctica en la que los participantes saltan desde grandes alturas, volando horizontalmente antes de encoger el cuerpo en el aire para que manos y pies golpeen el agua simultáneamente. El salto de Girardot no solo marcó un nuevo hito en la disciplina, sino que también puso a prueba sus propios límites físicos y mentales.
“Lo más difícil siempre es superar la barrera mental al principio”, confesó el joven francés tras su hazaña. “El tiempo en el aire fue mucho mayor de lo que esperaba, y sentí la mayor descarga de adrenalina de mi vida”. El salto desde La Cimbarrilla, una cascada conocida por su imponente altura, ha convertido a Girardot en una sensación internacional, atrayendo la atención de aficionados a los deportes extremos de todo el mundo, reseña UHNPlus.
Este nuevo récord consolida a Côme Girardot, como uno de los máximos referentes en el death diving y refuerza el atractivo de esta disciplina, que continúa ganando popularidad por sus impresionantes demostraciones de valentía y control.
