La reciente caída de los servicios de Microsoft ha provocado interrupciones masivas en millones de sistemas informáticos a nivel mundial.
Usuarios de diversas partes del planeta han expresado su frustración en las redes sociales, reportando que sus dispositivos con Windows experimentan apagados o reinicios repentinos, mostrando la temida ‘pantalla azul de la muerte’, destacan medios internacionales.
El origen de esta crisis radica en un fallo relacionado con CrowdStrike, un servicio de seguridad integrado en los sistemas de Microsoft, diseñado para bloquear malware.
La compañía de Redmond ha explicado en su blog oficial que el problema se debe a “un cambio de configuración en una parte de nuestras cargas de trabajo de backend de Azure, que causó la interrupción entre el almacenamiento y los recursos informáticos, resultando en fallos de conectividad”. Este fallo ha tenido un efecto dominó, afectando a “los servicios posteriores y dependientes de Microsoft 365”.
Además, la empresa de seguridad CyberArk ha señalado en una nota de prensa que “debido a que los terminales se han bloqueado con el error conocido como ‘la pantalla azul de la muerte’, no pueden actualizarse de forma remota, por lo que el problema debe resolverse manualmente, terminal por terminal”. CyberArk anticipa que este proceso de recuperación será largo y podría llevar varios días.