Entre el placer y la dependencia: navegando la adicción a los videojuegos

UNSPLASH

En una reciente entrevista, la psicóloga Ana Camacho abordó el tema candente de la adicción a los videojuegos y al Internet, destacando su relevancia en la actualidad.

Explicó que la adicción a los videojuegos y al Internet se ha convertido en un fenómeno de interés con el aumento del uso de tecnologías digitales. Desde una perspectiva cognitivo-conductual, este trastorno se entiende como una dificultad en controlar impulsos, atrapando al individuo en un ciclo de recompensa y castigo, perpetuando así su comportamiento adictivo.

La terapia cognitivo-conductual (TCC) se enfoca en identificar y modificar pensamientos automáticos y creencias irracionales que alimentan comportamientos adictivos. En el caso de la adicción a los videojuegos, esto puede incluir creencias relacionadas con el éxito en el juego o la evasión de problemas personales a través del mundo virtual. La TCC busca modificar estos pensamientos para reducir la dependencia del individuo en la actividad adictiva.

Técnicas de control

Las técnicas de control de estímulos y exposición son fundamentales. El control de estímulos implica modificar el entorno para reducir las señales que desencadenan el comportamiento adictivo, mientras que la exposición gradual a estos estímulos puede ayudar a disminuir la ansiedad y el impulso de participar en la actividad adictiva.

Prevención

La prevención de recaídas y el desarrollo de habilidades de afrontamiento son aspectos esenciales del tratamiento. Se enseñan estrategias para manejar situaciones de riesgo y se fomentan habilidades alternativas de afrontamiento. Esto incluye técnicas de relajación, junto a manejo del tiempo con actividades de reemplazo que proporcionen satisfacción fuera del contexto de los videojuegos o el Internet.

Estudios de investigación 

Los estudios y la investigación han demostrado la efectividad de la terapia cognitivo-conductual en la reducción del tiempo dedicado a los videojuegos y al Internet, así como en la mejora del funcionamiento personal y social. Es crucial buscar ayuda especializada en salud mental para abordar estos desafíos.

Se ofrecen consejos prácticos para reducir el tiempo de exposición y enfrentar la adicción, como establecer límites de tiempo, mantener dispositivos fuera del dormitorio y fomentar actividades alternativas.