Trump y Musk: Un mitin digital sin precedentes
En un movimiento audaz para fortalecer su campaña electoral, el expresidente de Estados Unidos y actual candidato republicano, Donald Trump, se unió en una conversación en directo con Elon Musk, el magnate y propietario de la plataforma X (anteriormente conocida como Twitter).
Este evento, que marcó un hito en la política digital, permitió a Trump exponer su visión del país y criticar abiertamente a los demócratas, con Musk respaldando firmemente sus puntos de vista.
Esta actividad, que generó gran expectativa, comenzó con un retraso de 45 minutos debido a un presunto ataque de denegación de servicio (DDOS) que afectó a la plataforma. Pese a los inconvenientes técnicos, la conversación atrajo la atención de aproximadamente 1,3 millones de personas, un número significativo aunque menor al potencial de audiencia que X afirmaba haber probado.
Durante el intercambio, Musk, quien se describió a sí mismo como un “demócrata moderado”, reafirmó su apoyo a Trump, declarando que el exmandatario representa “el camino de la prosperidad para Estados Unidos”, en contraste con la candidata demócrata Kamala Harris. Este respaldo no fue sorpresa, dado que Musk ya había expresado su apoyo a Trump en julio, señalando que el país se encuentra en un “punto de inflexión crítico”.
Trump, por su parte, aprovechó la plataforma para reiterar sus críticas hacia los demócratas y defender su legado, abordando temas como la inmigración ilegal y la situación económica del país. En un tono característicamente combativo, Trump instó a los votantes a rechazar a Harris y su propuesta política, mientras que Musk cuestionó la narrativa moderada que se ha intentado construir alrededor de la candidata demócrata.
La conversación, que se extendió por dos horas, se transformó en un mitin digital sin precedentes, subrayando la alianza entre Musk y Trump. Ambos líderes compartieron una visión pesimista sobre la dirección del país bajo la administración actual, reforzando la idea de que las próximas elecciones serán decisivas para el futuro de Estados Unidos.