En un dramático giro de eventos, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha rechazado la resolución presentada por Estados Unidos que buscaba un alto el fuego inmediato entre Israel y Hamás, así como la liberación de rehenes en manos del grupo terrorista.
El voto en contra de Rusia y China, quienes ejercieron su poder de veto, fue determinante para la negativa de la resolución. A pesar de que Argelia también votó en contra, su estatus no permanente no habría sido suficiente para impedir la aprobación de la resolución.
La propuesta de Estados Unidos contó con el respaldo de once votos a favor, mientras que Guyana se abstuvo. Sin embargo, la oposición de Rusia y China se fundamentó en los términos de la resolución, que incluía una condena explícita a Hamás, algo que ambos países rechazan.
El representante ruso ante el Consejo, Vasily Nebenzya, defendió la postura de su país, señalando que Estados Unidos ha vetado varias resoluciones de alto el fuego desde el inicio del conflicto.
Por otro lado, la representante estadounidense, Linda Thomas-Greenfield, acusó a Rusia y China de sabotear el proceso por razones políticas, afirmando que preferían ver fracasar la resolución antes que permitir el éxito de un texto redactado por Estados Unidos.
Actualmente, los miembros del Consejo están trabajando en un texto alternativo. Sin embargo, Thomas-Greenfield advirtió que Estados Unidos vetará cualquier propuesta que no exija la liberación de los rehenes israelíes como parte del alto el fuego.