Juez federal ordena a EE.UU. traer de vuelta a migrante salvadoreño deportado por error en tres días
Un juez federal en Maryland ordenó al gobierno estadounidense la repatriación inmediata de Kilmar Abrego García, un migrante salvadoreño deportado por error, destacando fallas críticas en el sistema migratorio bajo la administración Trump.
El juez federal del Distrito de Maryland, Peter Messitte, emitió una orden sin precedentes exigiendo al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos traer de vuelta en un plazo máximo de tres días a Kilmar Abrego García, un salvadoreño deportado erróneamente a su país de origen el 8 de marzo pasado. La decisión judicial llega tras confirmarse que Abrego García, residente legal bajo un Estatus de Protección Temporal (TPS), fue injustamente deportado durante una operación masiva dirigida contra pandilleros.
Abrego García fue detenido el 5 de marzo durante una redada del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Baltimore, Maryland, donde trabajaba como cajero en un supermercado. ICE lo confundió erróneamente con un supuesto miembro de la pandilla MS-13, lo que llevó a su expulsión inmediata en uno de tres vuelos con destino a El Salvador, anunciado públicamente por el secretario de Seguridad Nacional, Chad Wolf, como parte de la lucha contra la criminalidad.
La deportación errónea salió a la luz gracias a la intervención legal liderada por la esposa de Abrego García, Marisol Hernández, ciudadana estadounidense, y la abogada Susan Paulette, quienes presentaron una demanda de emergencia contra la deportación ilegal el 15 de marzo. El juez Messitte, tras revisar evidencia contundente de negligencia por parte de ICE, calificó la deportación como una "violación grave del debido proceso garantizado por la Quinta Enmienda", ordenando el retorno inmediato del afectado y la apertura de una investigación interna sobre procedimientos de deportación.
El DHS admitió el error administrativo y afirmó estar tomando las medidas necesarias para cumplir con la orden judicial. Sin embargo, la situación es crítica, ya que Abrego García permanece desaparecido en El Salvador, país donde las pandillas representan una amenaza constante para su seguridad. Su familia perdió contacto con él poco después de su llegada al país centroamericano, lo que aumenta la urgencia de la situación.
El caso generó una oleada de protestas y reclamos de justicia por parte de activistas y políticos. Una vigilia frente al centro de detención de ICE en Baltimore y campañas en redes sociales, bajo hashtags como #JusticeForKilmar, exigieron transparencia y el fin de las deportaciones arbitrarias. Por su parte, políticos demócratas como el senador Chris Van Hollen calificaron el incidente como "una vergüenza nacional" y exigieron audiencias sobre las prácticas de deportación del gobierno.
Este fallo representa otro duro golpe judicial para la política migratoria del presidente Donald Trump, poniendo en evidencia errores estructurales graves en un sistema que privilegia la rapidez sobre la precisión, generando profundas implicaciones humanitarias y legales.